48 horas después de la operación

Aquí me encuentro delante de mi portatil, con la pierna en alto escribiendo estas líneas. Lo primero que tendría que decir que se me hace raro hacer la crónica de una operación, me gusta más hacerlas de las carreras, por mucho que se sufra en ellas.

La parte positiva es que no hay mucho que contar, entré al quirófano sobre las cinco y las cinco y media ya estaba en la sala de reanimación, primer elemento positivo, no pude ver la operación, pero si escuchaba al Doctor traginar con mi rodilla y la rapidez y ausencia de otros males mayores me daba mucha esperanza. Me comentó al terminar que todo había ido bastante bien y que había dejado bastante trozo de menisco interno, algo más que positivo.

Me operó el Dr. Martinez Pagán del Instituto Traumatológico del Sureste, me podía haber operado con algún médico más "famoso", pero siempre he acudido a este centro con las diversas lesiones que he tenido y siempre me ha tratado de maravilla, con lo que está vez y aunque todavía sea pronto para decirlo no iba a ser una excepción.

Así pues y siguiendo indicaciones del Dr. tengo que estar en reposo hasta el Martes que viene, cuando me retirarán los puntos y se determinará que tipo de rehabilitación debo hacer. Lo mejor de todo es la casi ausencia de dolor en la rodilla después de la operación, por lo cual estoy bastante esperanzado. De hecho y de manera ya un poco alocada he estado mirando el calendario de carreras y viendo donde podría volver al apasionante mundo de las carreras, pero prefiero tomarlo con calma y seguir al pie de la letra todas las instrucciones del Traumatólogo.

Esperando al quirofano

Lamentáblemente y después de intentar sortearlo, no he tenido más remedio que acudir a la artroscopia para intentar salvar mi rodilla derecha, el próximo martes todas mis esperanzas están puestas en que solo tenga, al menos como así decía la resonancia, el menisco roto y sobre todo que se pueda quitar la menor parte posible, que me permita volver a los entrenamientos con relativa facilidad.

No me quiero poner tiempos de recuperación, es muy posible que no haya más medias hasta después de verano y quien sabe si podré o no seguir corriéndolas. Para quitarme el gusanillo el último día de año, como casi siempre, corrí la San Silvestre de Murcia, cada vez más numerosa, pero igual de desorganizada que otros años, mejoró la salida ocupando la Gran Vía entera y el recorrido haciéndolo algo mas largo que el año anterior, aun así no mucho mas de 6.700 metros, frente a los sempiternos 7.200 anunciados. El problema llegó en la zona de meta, insuficiente a todas luces, misión casi imposible pillar algo de hidratación, no hablemos del fiasco de la devolución de los 5 euros del chip.

En cuanto a mi carrera, intente no cebarme en exceso, ya que sabía que notaría la falta de entrenamiento, más bien la ausencia de entreno, ya que en los últimos meses, me he dedicado básicamente a trabajo de gym y largas caminatas para no perder mucha masa muscular. Mi tiempo 31:26, a 4:40km, no esta nada mal para alguien que ha cogido casi 7 kilos desde el mi último maratón. Perdonad la calidad de la foto, no he encontrado otra en internet.

Lo dicho, deseadme suerte y como tendré mucho tiempo libre al tener que estar en casa sin apoyar la pierna ya iré contando como voy evolucionando.